La paradoja de la Geotermia en "El Tatio"

. jueves, 5 de noviembre de 2009

Por Nelson Núñez. Mucho tiempo se lleva discutiendo en Chile sobre la conveniencia de diversificar la matriz energética, para dejar de lado la escasez, la dependencia que tuvimos con Argentina y al mismo tiempo incorporar energías limpias a nuestra producción. Todo esto, potenciando las fuentes que el país posee: la energía eólica, solar, mareomotriz y geotérmica.

Es en este escenario de escasez energética que el Consorcio conformado por la Italiana ENEL (Controladora de ENDESA) junto a las empresas estatales ENAP y CODELCO, han comenzado el proceso de exploración de las potencialidades para la producción de energía geotérmica en los campos de géiseres de “El Tatio”, hecho que ha quedado evidenciado para el gran público por el incidente que provocó una fumarola de 60 metros en la zona.

Este accidente pone en entredicho la real sustentabilidad que tendría la producción energética por la vía geotérmica y pone en evidencia, además, las múltiples fallas asociadas a los procesos de prospección.

Tomando en cuenta que ya ha pasado un tiempo desde el control de las emanaciones de vapor de las faenas, parece razonable hacer una revisión y analizar algunos aspectos que, por el bien de la producción de energías limpias, las autoridades deben considerar antes de autorizar nuevas iniciativas:


Emplazamiento del proyecto

Emplazamiento del proyecto


1. Turismo v/s energía: El área en que se produjo el accidente geotérmico es ampliamente conocida por su atractivo natural, de hecho los geéseres de “El Tatio” fueron declarados zona de interés turístico en el año 2002. Esta actividad genera múltiples fuentes de trabajo y prácticamente sostiene la economía de la zona, visitada por 100.000 personas al año y es, a mi juicio, una de las tres postales naturales de Chile (junto a la Isla de Pascua y las Torres del Paine). Con estos antecedentes, la pregunta surge de inmediato: por qué elegir “El Tatio” para un proyecto que puede comenzar a cambiar la forma en que Chile accede a la energía? Sin duda, a la luz de los hechos, ha sido una decisión desafortunada y apresurada, que no ha considerado que en Chile hay más de 300 fuentes de energía geotérmica, siendo uno de los países con mayor potencial en el mundo.

Merecía la pena poner en riesgo uno de los principales focos turísticos por una prospección? Hasta qué punto las necesidades de producción de energía superan el interés por mantener y potenciar una economía local dinámica, exitosa y con proyecciones internacionales en el contexto turístico?

2. Involucramiento de las comunidades: el proyecto en cuestión se inserta en el área de influencia de comunidades atacameñas, además de la natural incidencia de las poblaciones y actividades económicas asentadas en los alrededores. Estas comunidades no han sido involucradas ni consultadas en todo el proceso de prospección.

El conglomerado que realiza las faenas olvida, al parecer, que las actividades productivas (en especial las energéticas) ya no sólo requieren permisos legales para poder implementar una obra, sino que necesitan de la cada vez mas importante “Licencia Social” (también llamada Licencia para Operar), imprescindible como parte de la validación de las empresas y sus obras frente a los diversos grupos de interés.

Esta Licencia Social no es un proceso administrativo ni un procedimiento para la obtención de un certificado, es el resultado de un proceso de diálogo continuo y comunicación permanente entre la Empresa y la(s) Comunidad(es) interesada(s). En él se establece como política básica cumplir todo lo que se promete. Corresponde, en definitiva, al reconocimiento y aceptación de la convivencia, siendo esta la validez práctica que solamente se obtiene del involucramiento, cuestión que obviamente en este caso, se ha pasado por alto. Tal vez el error está en la escasa visión de quienes son responsables de la prospección al no considerar, que pese a que puedan contar con todos los permisos legales en la mano, si no cuentan con esta Licencia Social, las obras puedan llegar a paralizarse más temprano que tarde (numerosos son los ejemplos a nivel internacional que evidencian esto) .

3. Energía Limpia no significa impacto 0: la geotermia no es una actividad que no genere impacto, pese a ser una gran alternativa a la hora de ampliar nuestra matriz energética posible, por ejemplo, que los campos geotérmicos colapsen si no se toman los resguardos necesarios, por lo que se debe tener clara conciencia de los riesgos asociados los que deben ser evaluados e integrados en la gestión de nuevas prospecciones. Las reales implicancias del accidente que se produjo, de hecho, aún están por verse.

Fumarola provocada por el accidente


Fumarola provocada por el accidente

4. Local v/s nacional: se debe comenzar a realizar análisis sistémicos antes de comenzar a producir cualquier tipo de energía limpia, dado que siempre existirán intereses tanto locales como nacionales. No podemos pensar que pese a que existen claras necesidades nacionales de energía se pueden postergar y obviar las particularidades locales y producir energía (en este caso geotérmica) a cualquier costo. El desarrollo nacional no puede ni debe estar desconectado del desarrollo local.

5. Eficacia de Instituciones Públicas.: nuevamente nuestras autoridades ambientales han evidenciado una demora excesiva en su capacidad de respuesta, dejando muchas dudas sobre sus reales capacidades fiscalizadoras. Es hora que la autoridad haga su trabajo pensando en la sustentabilidad de largo plazo y no enfocada en el impacto de corto plazo.

Es por todas estas razones que el incidente de “EL Tatio” debe ser cuidadosamente abordado por todos los actores involucrados: estamos, como país, en una encrucijada vital, donde podemos finalmente tomar un camino que apunte al desarrollo sustentable a través de la producción de energías limpias como la geotérmica. Al mismo puede darse la paradoja que la ineficiencia y la escasa visión sistémica que han demostrado los responsables de este proyecto (algo elemental a la hora de realizar cualquier intervención del medio) hagan inviable dar el paso adelante y manchen para siempre la validez de este tipo de fuentes energéticas.

La buena noticia es que aún se puede rectificar, y es la sociedad entera la que debe estar atenta a este tipo de intervenciones y exigir tanto a las autoridades como a las empresas que accidentes como el de “El Tatio” no serán tolerados porque el Desarrollo del país no será a cualquier precio.